Inspirar: La Oportunidad Para el Desarrollo del Potencial del Niño.

La filosofía del aula en una generación será la filosofía del gobierno en la siguiente

– Abraham Lincoln

Muchas veces lo que vemos en nuestra sociedad y país, no nos agrada.

Nos desagrada el gobierno, los políticos, los empresarios, la policía, etc. Pero muy pocas veces volteamos al origen de ello. ¿Sabes dónde se formó el policía corrupto, el gobernante deshonesto, el empresario poco generoso? En la escuela cuando era niño. Sí, no desestimo la formación del hogar y los padres, pero el colegio tiene la enorme ventaja de poder influenciar positivamente la vida de un niño o adolescente, en la vida escolar diaria.

Y es que el colegio no sólo son boletas, horarios, clases, calificaciones. El colegio es fundamentalmente el lugar que provee la oportunidad de al menos dos cosas importantes:

- Formación del carácter del niño o niña

- Desarrollo de su potencial.

El colegio es el lugar dónde el niño puede descubrir sus habilidades y dones, el lugar dónde un buen maestro mediante la observación puede impulsar a su alumno a desarrollar su pleno potencial.

El potencial de un niño es algo más que pruebas del IQ (Coeficiente Intelectual), es descubrir la esencia de lo que Dios plantó en un niño o niña, y cuanto más claro tenga eso el niño, más probabilidades tendrá en la vida.

Por supuesto que el primero que debería descubrir el potencial del niño es el propio padre o madre.

-Una de las figuras que la biblia maneja para un padre o madre es la de un hombre que lleva a la espalda flechas listas para ser lanzadas tan lejos como sea posible. Esa es la lectura bíblica, que los padres podamos inspirar y formar lo necesario en los niños para que alcancen el pleno potencial que Dios por diseño ha puesto en ellos. (Salmo 127:4-5)

Papá, Mamá, la educación o el colegio no son juntas, boletas, promedios, exámenes, horarios (sólo es parte de), la verdadera educación es INSPIRAR a los hijos, a nuestros niños a llegar a ser plenos en su potencial.

Es aprender a soñar con ellos, es decirles todos los días que nada es imposible de alcanzar.

Cuida tus palabras y ejemplo para ellos. Pregúntate cada día: ¿Mis palabras están inspirando a mi hijo o lo están desanimando y conformando a algo que no es su pleno potencial?

Cuando Dios en el libro de Génesis crea al ser humano, hizo todo para ponerlo a su disposición para después decirles: “Fructifiquen y multiplíquense, y gobiernen sobre todo”. (Génesis 1)

Ese fue siempre el plan original de Dios. Dios pensó desde el inicio en el potencial que había puesto por diseño en cada uno de nosotros.

¿Te fijas que Dios hizo muchas cosas a favor del ser humano, pero le dejó la OPORTUNIDAD de desarrollarse y crecer por sí mismo, y llegar a gobernar alcanzando así el potencial que cada uno tiene?

Tu papel como padre, madre o como educador, no es hacer todo en lugar de tu hijo, sino ser un facilitador que despierte e inspire el potencial, la identidad que por diseño tenga el niño o niña.

Te platico algo, mi hija Fannie estuvo en el Colegio Kairos, fue de las primeras generaciones en graduarse de High School. Mi esposa desde que Fannie era niña, le inculcó fuerte la lectura, creo le compraba más libros que juguetes. ¿Qué estaba haciendo? Estaba actuando como una facilitadora para el potencial de Fannie, pues un hábito de lectura desarrolla más el lenguaje, buena redacción, ortografía y una buena cultura general. Pronto Fannie no sólo leía en español, también en inglés.

Cuando estuvo en Colegio Kairos, el profesor Adolfo fue estricto con ella, nosotros jamás pedimos una junta con él para hacerle algún reclamo, y ante cualquier queja de la chica al respecto, respaldábamos la autoridad del director. El profesor Adolfo llegó a apreciar mucho a mi hija, y hasta le dio trabajo recién salió del colegio.

Fannie contó con profesores y maestros para los cuáles no era un número más. Miss Patty tenía con ella y otros alumnos largas conversaciones dónde les animaba a descubrir el amor de Dios. No terminaría de nombrar a varios profesores que ayudaron a inspirar a mi hija.

En Accelerated Christian Education (A.C.E.), el Programa Educativo que lleva Colegio Kairos, hay un programa de Misiones al que pueden asistir los estudiantes alrededor del mundo. Fannie (adolescente) se emocionó tanto con un programa de Misiones a Honduras, que se anotó. Por supuesto no era nada barato, el viaje, el avión, pasaporte, etc. Pero ni mi esposa ni yo la desanimamos, jamás le dijimos que era imposible.

Fannie se puso a hornear pasteles y Cupcakes y los vendía a todo quién podía. También llegó a trabajar en vacaciones en un Oxxo, todo con tal de ayudar a juntar para los gastos del viaje, por supuesto ayudamos, pero el mérito fue de ella.

Fue de Misiones a Honduras, Nuevo México (EUA), Guerrero (México). Trabajó saliendo de High School, en una empresa de logística y herramientas. Ahí ahorró y viajó a California (EUA) y finalmente entró a la universidad de su elección.

De nuevo, nunca le dijimos era imposible. Estudió en una excelente universidad privada, tenía beca pero aún así debíamos apoyarla al menos el primer año. Después Fannie estudiaba por la mañana en la universidad y por la tarde trabajaba en Costco. No fue nada fácil. Tenía horarios agotadores, pero ya le alcanzaba para pagarse la universidad.

Finalmente un año antes de terminar la carrera, una empresa global de logística, de origen estadounidense, le ofreció entrar de becaria. Lo hizo tan bien, que rápidamente escaló puestos y fue contratada por la empresa. En sólo dos años, mi hija ha escalado puestos el equivalente que a otras personas de la empresa les ha llevado 10 y hasta 15 años. Actualmente es Project Manager en CH Robinson, tiene sus oficinas atrás de Plaza Antea, ha vivido por trabajo en San Pedro Garza G. (Nuevo León) y en Querétaro. Y puedo decirte que muchos de su generación del colegio han sido “10 veces mejores” (ver libro de Daniel).

Inspira a tus hijos a ser 10 veces mejores, a no conformarse al promedio de todo el mundo.

Conoce a cada niño, no todos tienen el MISMO POTENCIAL. Hay quién brillará en las artes y lo creativo. Otros en las matemáticas, ingenierías y ciencias exactas. Otros en los deportes y habilidades físicas, pero no olvides que la base es la formación y desarrollo de carácter.

Una de las cosas que en tema de carácter más inspira e influye en un hijo o hija es el ejemplo, tu ejemplo. Es algo poderoso que nunca olvidará, sea bueno o malo.

Y tus palabras, tus palabras serán como ladrillos que lo construyan o lo derriben. Las palabras son como esos ladrillos, así que cuida lo que les dices cada día. Regaña o amonesta pero nunca los insultes.

Emociónate, si tienes un hijo o hija de 6,8, 12, 14 años, porque son como lienzos en los cuáles está ya escondida una obra de arte.

Cuándo preguntaron a Miguel Ángel como había logrado hacer “El David”, él dijo: “Siempre estuvo ahí, sólo tuve que quitar todo lo que sobraba en la piedra y emergió por sí mismo”.

Francisco Javier Brito M.

Investment Advisor

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